El sacerdote bávaro Sebastian Kneipp es probablemente el pionero más conocido de la naturopatía y la medicina holística moderna. Tras caer gravemente enfermo de tuberculosis en 1849, redescubrió los métodos curativos tradicionales y se curó tomando varios baños en el frío Danubio. Este éxito le llevó a estudiar más a fondo los poderes curativos de los baños y las plantas medicinales. Además de sus actividades religiosas, el desarrollo de métodos curativos holísticos se convirtió en una parte importante de sus investigaciones y acciones. Publicó numerosos libros en los que explicaba sus métodos y daba consejos sobre cómo llevar un estilo de vida saludable. Aunque al principio se enfrentó a la hostilidad de la profesión médica establecida, con el tiempo sus métodos fueron reconocidos y utilizados por los médicos.
En el mundo actual, donde muchas personas sufren estrés y contaminación ambiental, el legado de Kneipp es más relevante que nunca. Su concepto, que activa los poderes autocurativos del cuerpo, satisface la necesidad de muchas personas de asumir la responsabilidad de superar los problemas de salud mediante una terapia eficaz y medidas preventivas. La terapia Kneipp preventiva se utiliza principalmente para el fortalecimiento general, para aumentar las defensas del organismo y para entrenar las funciones circulatorias. Comenzando en Wörishofen, donde trabajaba como clérigo, los descubrimientos de Sebastian Kneipp se extendieron por toda Europa y hasta los Estados Unidos. El gran número de balnearios y asociaciones Kneipp en Alemania demuestra la importancia que sigue teniendo hoy en día el concepto de salud holística de Sebastian Kneipp.
Además de los tratamientos acuáticos asociados a su nombre (hidroterapia), el tratamiento de la salud según Sebastian Kneipp también incluye la alternancia de tensión y relajación (terapia de reorganización), el ejercicio, una dieta sana y el uso de remedios herbales (fitoterapia). Cuando Kneipp conoció al farmacéutico de Würzburg Leonhard Oberhäußer en 1890, encontró en él un amigo y compañero de campaña en su empeño por seguir desarrollando los métodos naturistas y la fitoterapia en particular en beneficio de la humanidad. Basándose en los muchos años de estudios y experiencia de Kneipp, trabajaron juntos para desarrollar productos medicinales, cosméticos y dietéticos cuyos principales principios activos eran extractos naturales de plantas. Kneipp no tardó en ceder a Oberhäußer el derecho a ofrecer y comercializar en exclusiva todos los productos desarrollados y fabricados según las directrices de Kneipp, etiquetados con el nombre y la imagen de Sebastian Kneipp. Los probados remedios basados en estas recetas siguen siendo demandados y producidos en la actualidad.