Michael Droste-Laux Jabón alcalino de piedras preciosas con aceite de pino de piedra suiza

Nuestro jabón alcalino de piedras preciosas con aceite de pino piñonero suizo redefine por completo el sofisticado arte de hervir e interpreta los jabones de lujo de una forma única. El aceite de oliva constituye la base del jabón básico. La composición del aceite de oliva es casi la misma que la de nuestro tejido graso subcutáneo. El aceite mediterráneo tiene un alto contenido en nutrientes, por lo que es ideal para el cuidado de la piel.

Nuestro aceite esencial puro de pino piñonero suizo procede de la paradisíaca región alpina del Tirol del Sur y de los conos, agujas y madera de los pinos piñoneros suizos. Cualquiera que haya tenido el placer de dormir en un dormitorio de pino cembro conoce su aroma cálido y balsámico que llega al alma y garantiza un sueño reparador. Los aromas del pino cembro estimulan la producción de dopamina, responsable de la producción de las hormonas de la felicidad. También en este sentido, nuestro jabón alcalino de piedras preciosas favorece el equilibrio mental y, sencillamente, ¡le hace feliz!

Cada vez que utiliza nuestro jabón de piedras preciosas para el cuidado corporal, tiene en sus manos 70 millones de años de historia. Sin embargo, desde el punto de vista geológico, la creta curativa de Rügen es una roca joven que se formó cuando se secó el mar primitivo. Está compuesta en un 98% de carbonato cálcico. El 2% restante está formado por magnesio, silicio, hierro y otros compuestos. Su fina estructura cremosa y su color blanco puro la hacen ideal como ingrediente de nuestro jabón. La tiza curativa de Rügen estimula el metabolismo de la piel, tiene un efecto descongestionante y antiinflamatorio y mejora su aspecto. El tejido conjuntivo se desacidifica y fortalece.

La adición de proteína de trigo favorece el uso del jabón de piedras preciosas como jabón para todo el cuerpo y el cabello. El agua caliente, el secado intensivo y el cepillado enérgico, la exposición al sol y el agua salada dañan el cabello. El cabello se ve dañado, sin brillo y débil, con las puntas abiertas y la cutícula dañada. Las proteínas de trigo cubren el cabello con una película protectora y alisan la cutícula áspera. El cabello recupera elasticidad, resistencia y una estructura sana.

La onagra común despliega sus flores amarillas en la oscuridad. De sus semillas se extrae su eficaz aceite, rico en ácido gamma-linolénico y linoleico. Estos dos ácidos oleicos pertenecen a los ácidos grasos poliinsaturados omega-6 y refuerzan la capa de barrera lipídica de la piel. Varios estudios han demostrado un efecto positivo sobre la piel seca y la neurodermatitis.

El elemento silicio es un ayudante de belleza por excelencia y el componente principal de una piedra curativa de Suiza. El mineral silicea no se encuentra aislado en la naturaleza. El contenido de silicio en las células es responsable de la elasticidad del tejido conjuntivo y de una buena capacidad para fijar el agua. La piel flácida, apagada y poco elástica queda bien hidratada y vuelve a tener un aspecto más firme y juvenil.

Las piedras preciosas centellean, centellean, brillan y ejercen una atracción sobre nosotros. En todas las culturas, los cristales preciosos han establecido una conexión entre el mundo visible y el invisible. Vienen de la eternidad y apuntan a la eternidad. Nunca son mera materia y transmiten vibraciones e información almacenada. Las tres piedras preciosas aguamarina, cristal de roca y cuarzo rosa dan nombre a nuestro jabón de lujo. El objetivo de nuestro jabón de piedras preciosas es combinar la selección selectiva de cristales materiales con posibilidades sutiles. Las moléculas danzan en la espuma de jabón delicadamente suave para dar a la piel un aspecto de claridad y pureza cristalinas.

En la botánica clásica y la ciencia de los medicamentos, existe el grupo vegetal de las saponinas, que incluye numerosas plantas muy conocidas: El abedul, la hiedra, la margarita, el gordolobo, el castaño de Indias, el prímula, el pensamiento, el regaliz y, por supuesto, la hierba de jabón. Después de todo, el nombre botánico saponaria officinalis ya indica el alto contenido en saponinas de esta admirable planta medicinal. Las saponinas reducen la tensión superficial de los líquidos y forman espuma a partir del agua y el aire. Esto disuelve y elimina las partículas de suciedad, que se aclaran con agua corriente.

Olivato de sodio (aceite de oliva), Cocoato de sodio (aceite de coco), Estearato de sodio (emulsionante), Aqua (agua), Aceite de hoja de Pinus Cembra (aceite de pino piñonero suizo), Carbonato de calcio (tiza curativa de Rügen), Glicerina (vegetal), Cloruro de sodio (sal), Proteína de trigo hidrolizada (proteína de trigo), Aceite de Oenothera Biennis (aceite de onagra), Limoneno (componente de los aceites esenciales), Sílice (sílice), Agua marina, Cristal de roca, Cuarzo rosa (mezcla de piedras preciosas), Diacetato de glutamato tetrasódico (agente complejante biológico), Extracto de hoja de Saponaria Officinalis (hierba jabonera), Hidróxido de sodio (bicarbonato sódico)